¬ Sustrato específicamente desarrollado para el delicado cuidado de las plantas de interior
¬ Aportan belleza a nuestro hogar y nos acercan a la naturaleza, brindando una sensación de calma y bienestar.
¬ Aumenta la retención de nutrientes.
¬ Mantiene un pH balanceado.
¬ Favorece la aireación y respiración de las raíces.
¬ Evita cambios bruscos de temperatura.
¬ Algunas plantas necesitan estar siempre húmedas, y otras secas antes de recibir un nuevo riego.
En general, para saber cuándo es necesario regar se debe introducir el dedo en el sustrato: si sale seco, regar. Si sale húmedo, no regar y controlar al día siguiente. Evitar el exceso de riego, que suele ser uno de los problemas más habituales. Procurar un buen drenaje. Alejar las plantas de los focos de calor seco, y tratar de mantenerlas en ambientes húmedos. Pulverizar regularmente las hojas con agua natural, las hojas finas requieren normalmente más humedad que las gruesas y duras.
Se deben limpiar las hojas del polvo que puede acumularse sobre ellas. Esta acción además de tener una función estética, previene la formación de una capa que puede llegar a disminuir la cantidad de luz que recibe la hoja interfiriendo en la producción de clorofila y por lo tanto afectando el desarrollo de la planta.